El té es una bebida que ofrece múltiples beneficios físicos y mentales, y a sido utilizado extensamente como remedio natural en muchas culturas ya que son ricos en antioxidantes, que eliminan naturalmente los radicales libres, causantes de muchos problemas de salud.A la hora de buscar remedios naturales para calmar los nervios, relajarnos, aliviar un dolor de estómago o mejorar el estado de ánimo, la primera opción de muchas personas es ingerir medicamentos recetados, pero a veces olvidamos que hay una simple bebida natural que desde mucho tiempo ha probado ser más sana y saludable: el té.
Esta aromática infusión de plantas y hierbas, que por tradición es consumida en países asiáticos como remedio natural y suplemento dietético, es una modalidad de la medicina natural y hay evidencia médica de que este brebaje puede contribuir a un estilo de vida más saludable.
Hoy día, esta bebida es tan popular que es la segunda más consumida en el mundo después del agua. En Estados Unidos, la industria del té alcanzó en el 2007 ventas de $6,800 millones, un aumento considerable en comparación con los $1,800 millones reportados en 1990 según datos de la Asociación del Té de Estados Unidos.
Los tés son ricos en antioxidantes, una forma segura y natural de eliminar naturalmente los radicales libres, que son la causa de muchos problemas de salud. Aunque la clase médica estudia aún las múltiples propiedades del té, la organización médica Mayo Clinic Health, reveló que el té verde, el té rojo (“oolong”), el té negro y el blanco -todos producidos de la hoja del arbusto Camellia Sinensis- son beneficiosos pues las hojas de esta planta están cargadas con flavonoides, un antioxidante que ayuda a prevenir enfermedades crónicas.
El té blanco, por ejemplo, puede proteger contra el cáncer del colon, el té rojo ayuda a tratar la obesidad, y el té verde puede ayudar a reducir el colesterol, el riesgo de ataques cardiacos y la aterosclerosis y reducir la inflamación relacionada a la artritis.
Otros estudios revelan que tomar té regularmente, sea caliente o frío, puede fortalecer la densidad mineral de los huesos y minimizar los riesgos de la pérdida de memoria.
Otra interesante propiedad de los tés es su efecto relajante y sedativo, y las infusiones más populares para obtener relajación y conciliar el sueño son las de hierbas, como la valeriana, el tilo, manzanilla y la flor de parcha.
La parcha es una planta que crece en Europa, Norte y Suramérica y contiene derivados flavonoides y alcaloides que regulan el neurotransmisor en el sistema nervioso que reduce la ansiedad. Esta planta alivia la tensión y hasta los dolores de cabeza y de muelas. Otras infusiones con propiedades relajantes que también contribuyen a combatir la ansiedad son la flor de jazmín, toronjil, flor de crisantemo y el “skullcap”, una especie de planta herbácea de la familia de la menta, natural de Norteamérica.
Sin embargo, precaucion - los tés para dormir y relajarse no deben mezclarse con medicamentos depresivos.
Los tés también son remedios naturales para los cólicos y la irritación intestinal. El té de hinojo, una planta originaria de la región mediterránea, es uno de ellos. Esta bebida es suave y puede mezclarse en la comida de los bebés y niños. Este té también estimula el apetito y el flujo de la leche materna.
Para mejorar el estado de ánimo y aumentar la vitalidad, se recomienda el té de “ginseng” por sus beneficios contra el estrés y el rendimiento laboral. Otra infusión efectiva, es la combinación de tres hierbas chinas: “lycii”, “schizandra” y la raíz de regaliz (conocida en inglés como “licorice”). La lycii promueve energía, la shizandra purifica la sangre y ayuda a rejuvenecer la energía de los riñones, y la raíz de regaliz calma la mente y balancea el sistema.
Otros tés tienen propiedades afrodisiacas. El té de avena sativa y la infusión de frutillas de “schizandra” ayudan a aumentar el deseo sexual.
A pesar de los efectos positivos del té, los médicos naturopáticos alertan que el consumo en exceso puede hacer daño, por lo que recomiendan tomarlo moderadamente, una o dos veces al día, y que las personas con enfermedades serias deben tener supervisión médica.
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