Los recientes descubrimientos en la medicina natural y complementaria abren las puertas a nuevos tratamientos y oportunidades de sanación para los pacientes alrededor del mundo. Asimismo, la combinación de la medicina tradicional con las modalidades terapéuticas de la medicina complementaria o alternativa nos provee herramientas adicionales que ayudan a promover un buen estado de salud, al tiempo que contribuyen a prevenir el padecimiento de enfermedades.
El propósito de la medicina natural es, básicamente, la prevención de la enfermedad. Sin embargo, si ya existe una condición, la intervención coordinada de terapias alternativas y remedios naturales, junto con el tratamiento médico tradicional puede contribuir a restablecer la salud física, mental y emocional del paciente.
El hecho de complementar un tratamiento de medicina convencional con la medicina alternativa beneficia al paciente en varios aspectos. En primer lugar disminuye la carga de los órganos como el hígado y los riñones que a veces se ven forzados con múltiples medicamentos para atender diferentes condiciones médicas. La medicina complementaria ayuda a activar los mecanismos fisiológicos del propio organismo logrando, en muchos casos, aumentar la efectividad del tratamiento tradicional.
Existen varios aspectos que la medicina tradicional no impacta de forma integrada, por ejemplo, el aspecto sicológico y emocional del paciente con alguna condición aguda o crónica. Los beneficios de la combinación de terapias son muchos e incluye cuidado y sanación de las enfermedades, hasta el manejo de condiciones crónicas o incurables que ayuden a prevenir una muerte prematura.
Se ha visto, por ejemplo, que pacientes con condiciones médicas agudas o crónicas y que reciben tratamiento de medicina alternativa, con remedios naturales por ejemplo, se recuperan más rápido que aquellos que no reciben este tipo de tratamiento. Además, personas con diferentes condiciones de salud han experimentado un alivio significativo tras recibir este tipo de tratamiento. Estos son altamente recomendables para personas que padecen condiciones que requieren un programa de manejo de dolor crónico y agudo, así como para pacientes con condiciones neurológicas como migraña, neuropatía y parálisis facial, entre otras.
De igual forma, la combinación de terapias convencionales y alternativas beneficia a pacientes con condiciones músculo esqueletales crónicas o condiciones terminales; al igual que personas con enfermedades gastrointestinales, alergia y asma. Las terapias de la medicina alternativa incluyen disciplinas con tradiciones centenarias como la acupuntura, la medicina tradicional china, reflexología y el masaje terapéutico; así como aplicaciones más contemporáneas como la medicina bioenergética, quiropraxia, terapia neural, terapia bioxidativa (de oxígeno) e hipnoterapia, entre otras. Estos tipos de tratamientos han probado ser opciones terapéuticas eficaces para el manejo del dolor y alivio de condiciones como discos herniados, artritis, síndrome del túnel carpal, migrañas, entre otras.
martes, 3 de agosto de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario